
Llega la recta final del Mundial de F1 y la primera parada es el G.P. de Japón. El año pasado, Fernando Alonso abandonó en este escenario presidido por el monte Fuji, a causa de su accidente por culpa de la lluvia.
Para este año, se espera lluvia nuevamente. Pero la situación es otra. El ovetense viene de conseguir una victoria que fue como ganar un Mundial; el Mundial que el año pasado se jugaba en Fuji. Ahora, con lluvia o sin ella, la presión sobre Fernando no es la misma; todo lo contrario que sobre Massa y Hamilton o incluso Kimi, que ya tiene perdido el tren.
Con todo esto bien sabido, Alonso consiguió el segundo puesto en los entrenamientos de hoy, confirmando que el R-28 sigue en la línea ascendiente. Es una pena que se haya conseguido al final de la temporada, pero el tiempo no espera a nadie. De todas formas, la realidad la podremos ver en las sesiones de las "cronos" de mañana, en donde la velocidad punta será muy importante, puesto que en Fuji está la recta más larga del Campeonato.
De momento, las sensaciones son buenas y el ánimo en Renault está muy arriba. El objetivo para el domingo será el de salir en la tercera o cuarta fila, siempre ciñéndonos a las palabras del propio Alonso.
Nos vemos en Fuji.
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